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Y aquí lo tenemos. El 5s, el mimado, el intelectual, el de la tecnología punta, el caro. Tras su presentación oficial no hemos podido evitar mostrarte qué tal pinta este nuevo iPhone 5s, y sinceramente estaría mal no decirlo, luce tan espectacular como siempre. Pero en esta ocasión estrena nuevo traje de gala que seguro levantará numerosas críticas, ya sean a favor o en contra. Apple lo ha vendido como el terminal que comienza en los 199 euros, sin embargo, aquellos que no quieran ataduras de 24 meses de contrato tendrán que desembolsar la cantidad de 699 euros (precios para España) para obtenerlo de manera libre y sin tarifas. La cuenta con el resto de hermanos no resulta muy complicada, ya que sólo tendremos que sumar 100 y 200 euros a las versiones de 32 y 64 GB respectivamente.

Tal y como sabrás a estas alturas, este nuevo 5s llega con algún que otro cambio en su exterior, destacando principalmente el botón de inicio, que ahora se presenta sin la clásica silueta del cuadrado, pero que llega rodeado de un anillo de acero que detectará la presencia de nuestro dedo. Con este aviso se activará la función del lector de huellas integrado, Touch ID, un elemento que permitirá leer hasta 5 huellas dactilares diferentes (ya veremos si Apple nos sorprende con un gestor de perfiles en el futuro) y con las que podremos desbloquear el teléfono sin ningún tipo de código de desbloqueo e incluso realizar compras a través de iTunes.

[Actualización: Tenemos un buen vídeo del iPhone 5s en acción por cortesía de nuestra amiga Myriam, que estuvo presente en el evento de Apple. Lo encontrarás tras el salto.]

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A nivel de diseño no ha cambiado nada desde el iPhone 5 original, presentando el mismo bisel de aluminio con bordes pulidos con diamantes y la misma pantalla de 4 pulgadas panorámica, aunque en lo que a acabados respecta, hay novedades con el nuevo dorado y las terminaciones superior e inferior del modelo en negro/grafito (o gris espacial, como lo llama Apple), que ahora son algo más brillantes. Respecto al dorado, no deberás preocuparte por deslumbrar a los que te rodeen, pero sí es cierto que en determinados ángulos saca a lucir su intensidad. El blanco por su parte sigue igual de inmaculado y limpio, por lo que no notarás ningún tipo de cambio respecto al iPhone 5 (excepto la confusión que produce el nuevo botón de home).

El sistema de lectura de huellas funciona realmente bien, ya que es rápido y preciso, y a la hora de desbloquear el teléfono hace que no queramos introducir nuestra secuencia personal de dígitos nunca más. Si algo hay que objetarle es que la primera calibración es lenta y un poco engorrosa, ya que el usuario tendrá que colocar el dedo en diferentes posturas (recordemos que Touch ID es capaz de reconocer el dedo en posturas de hasta 360 grados) hasta terminar con la configuración. Después de eso, todo es coser y cantar, obteniendo un teléfono con bastante seguridad y un método de identificación que posiblemente veamos evolucionar más adelante con compras online, etc.

A nivel de rendimiento el procesador A7 que incorpora este nuevo iPhone 5s promete duplicar la potencia de CPU y GPU del A6, pero eso es algo que no podremos comprobar con nuestros ojos hasta que no tengamos una unidad de pruebas. Del mismo modo, la cámara también ofrece mejoras en forma de un sensor un 15% más grande y un conjunto de ópticas de 5 elementos, unas dimensiones que han permitido introducir píxeles más grandes con los que capturar más luz (como el HTC One). Las tomas mostradas en la web oficial lucen espectaculares, pero al igual que el procesador, tendremos que compararlo en casa para poder sacar conclusiones. Hasta entonces, habrá que confiar en las cifras de Apple y seguir echando un ojo a la galería de imágenes que te dejamos en este artículo.

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